Los elementos urbanos, un soplo de aire fresco contra la contaminación de las ciudades
A diario paseamos por las calles de nuestras ciudades, pueblos, barrios… y la mayoría del tiempo no le damos el suficiente valor a los pequeños elementos que los conforman, que les dan la vida y que se convierten en su esencia. Y es que las farolas, bancos, espacios verdes o los parques infantiles son un ingrediente esencial para cualquier núcleo poblacional.
El espacio público es fundamental para el entorno urbano y, precisamente de su utilización, depende en gran medida el desarrollo saludable de una ciudad.
En la actualidad, la contaminación es uno de los grandes problemas a los que se enfrenta la humanidad. Grandes cantidades de dióxido de carbono se vierten cada segundo en un aire que los ciudadanos respiran; y, sobre todo los núcleos urbanos, focalizan la mayor parte de esta polución.
Por suerte, una de las grandes soluciones a esta problemática se encuentra más cerca de lo que pensamos: precisamente en esos elementos urbanos que nos rodean y que son tan esenciales.
Algo tan sencillo como usar materiales sostenibles para su fabricación, puede aportar grandes beneficios saludables y contribuir en gran medida a la descontaminación progresiva de un entorno urbano (más o menos grande).
Materiales como el pavimento continuo Id-sun o el granulado elástico Aqua, suponen un gran avance en este sentido; y su utilización en la configuración de los elementos urbanos, fomenta una descontaminación evidente debido a su procedencia.
Elementos urbanos y medio ambiente van de la mano. Y hoy en día es posible minimizar los daños de la contaminación gracias a una buena gestión de los primeros. Gracias al empleo de materiales sostenibles para su fabricación, procedentes de la economía circular. Y gracias a la apuesta por la innovación y el avance.